En 1989, Germán Vargas Antúnez pasaba la mayor parte de su tiempo invitando en los pasillos y servicios del Hospital Erasmo Meoz al personal medico, paramédico, de enfermería, administrativo y todos aquellos Cucuteños que entraban, a participar en las rifas que organizaba para “financiar mi tratamiento de la leucemia y vivir para ayudar a mi mamá”, como repetía parado junto a los semáforos de la ciudad.
Indudablemente él fue nuestro empuje, con su sonrisa y ganas de vivir nos dio una lección de vida esperanzadora, hoy en nuestra memoria un benefactor puntual de SANAR Cúcuta, avivó la llama de una idea que comenzó a gestarse dos años atrás, cuando en 1987 el oncólogo Esteban Hernández llegó a su ciudad natal a trabajar con los niños del hospital San Juan de Dios primero y luego, con los del Erasmo Meoz.
El recuerda que eran pocos los pacientes pero muchas las dificultades para conseguir los medicamentos por sus altos costos, entonces, hizo un contacto en la ciudad fronteriza de San Cristóbal para que le hicieran el favor de transcribirle las fórmulas y poder conseguir así las medicinas para los niños.
Hola buenas tardes, quisiera saber si uds son los dueños de la rifa que estan ofreciendo a nombre de la fundacion sanar?? por un costo de 50.000 pesos
ResponderBorrar